Welcome

We are creative.

Follow us

Organización para desorganizados: pelis

Organización para desorganizados: pelis

Vuelve con vosotros la sección más esquiva del blog, la que aparece los viernes que me da la gana o que se me ha ocurrido algo digno de compartir. Y suele ser más lo primero que lo segundo.

Ya sabéis que en casa somos muy cinéfilos. Hace un tiempo os contamos que todos los viernes hacemos peli y pizza y que estamos intentando que los pompones se familiaricen con las pelis de los ochenta que nos marcaron al pomelo y a mí. Pero ellos también han desarrollado un ecléctico gusto personal que a veces nos horroriza (Hola, Adam Sandler) y a veces nos enternece (Hola, westerns viejunos y Alfred Hitchcock).

Sea como sea, en casa somos partidarios de decir que no hay cine malo, solo público inadecuado. O al menos de decírselo a los pompones, porque confieso que yo soy una esnob cinematográfica que detesta ciertos géneros, como por ejemplo, la comedia romántica posterior a los 90. La comedia pastelosa de los 50, en cambio, me encanta, aunque a lo mejor es por los vestidos y los peinados o por Katharine Hepburn y Gregory Peck.

Así que en casa hay montañas de películas. No, no, literalmente, montañas de DVD que amenazan con comernos y no caben en ningún sitio. Somos consumidores de cine. Y todavía vamos al videoclub.

Nuestra colección de DVD hace tiempo que se nos había ido de las manos y que ya no nos cabía en ningún sitio. Y por más que intentábamos tirar pelis… no podíamos. Nos quedábamos con el disco en la mano, mirándolo con ternura y recordando los buenos ratos que nos había hecho pasar. Todo lo demás ha ido saliendo de casa sin piedad, pero las pelis… Las pelis no.

Y un día, en el blog I heart organizing, vi una solución de almacenamiento que en un principio me horrorizó. Así que, coleccionistas sensibles, dejad de leer, porque ya me odiasteis el día de los discos y no quiero que nuestra relación se acabe aquí. La solución era simplemente tirar la caja de plástico y quedarte únicamente con el disco.

Creo que la chica que escribe el blog lo había hecho con los videojuegos, y ya os digo que mi primera reacción fue: ni hablar. Con las fotos tan bonitas, las portadas curradas, las ediciones especiales… Pero fue una de esas ideas que se te quedan en la cabeza y finalmente, un día, decidí comprar una caja en IKEA y probar con algunas pelis y documentales que no estaban entre mis favoritos, o que eran ediciones de periódicos y tal.

Qué cambio.

De repente había tirado una bolsa de basura llenita de cajas de plástico feúchas y que no me aportaban absolutamente nada y todos los DVD ocupaban una cuarta parte de la caja de IKEA. Y como me pasa con la mayor parte de los procesos de organización, le fui cogiendo el gusto. Dejé que pasaran unos días y volví a mirar mi colección de DVD. Y encontré otras cajas que podía tirar. Y volví a dejar pasar unas semanas, y la volví a mirar. Y poco a poco, lentamente, fui deshaciéndome de la mayor parte de las cajas.

Antes de que lo preguntéis: NO. No he tirado mis cajas metálicas de La novia cadáver, El sentido de la vida o El castillo ambulante. Ni las cajas de las ediciones especiales de El señor de los anillos. Todavía no estoy preparada y no pasa nada. Puedo tener ciertas películas dentro de sus cajitas sin ningún problema. Pero todas las demás, poco a poco, han pasado a vivir en fundas transparentes, dentro de una sola caja, donde las encontramos más fácilmente y ocupan infinitamente menos espacio.

Unos meses más tarde, de carambola, me di cuenta de que el cajón que había comprado en Ciclos Riera era de la misma medida que las cajas de IKEA, pero infinitamente más bonito, y más grande. El cajón ha sido objeto de una restauración intensiva (no tengo ninguna foto del antes y me da mucha rabia) en el curso que he hecho en el Ateneu de Sant Cugat y ha quedado así a falta de decidir si le vuelvo a poner su chapita original o si le busco una un poco más pequeña. ¿Qué os parece a vosotros?

Evidentemente, este no es consejo para jóvenes (pilláis la referencia cinematográfica, ¿no?) porque ahora todo el mundo tiene el cine en digital o… más revolucionario todavía: ¡no lo tiene! Paga cuando quiere verlo y punto. Pero si sois un poco menos jóvenes (pero todavía estáis de muy buen ver), a lo mejor tenéis el mismo problema acumulativo que nosotros.

Os lo recuerdo: es adictivo. Queda todo tan bonito y ordenado que nosotros ahora también tenemos los videojuegos y los discos que han sobrevivido guardados según este sistema, en cajas de fácil acceso junto a la tele.

¿Y vosotros qué? ¿Ya lo tenéis todo el digital o sois un poco analógicos todavía, como nosotros?

14 Comments
  • noialand
    Posted at 20:51h, 21 noviembre Responder

    Sería incapaz de hacer algo así. Trato de comprar el menor número de pelis posible (aunque con las series ando un poco desmadrada), he regalado y donado una enorme cantidad de DVD, pero, verlos desnudos en esa caja, me da penita, seguro que tienen frío.

    • Paula
      Posted at 22:04h, 23 noviembre Responder

      No, qué va, nada de frío. Y pueden charlar. A veces, por la noche, me acerco de puntillas al mueble con la luz apagada y los oigo conversar, cada uno con su tono, algunos más tiernos, otros más violentos, un par que dicen cosas absurdas y otros que se ríen sin parar. Creo que incluso hay algún romance en marcha.

  • Anónimo
    Posted at 23:52h, 21 noviembre Responder

    Las cajas metálicas de las ediciones especiales de los estudios Ghibli, jamás!! Lo de deshacerse de las cajas y quedarse con los CDs es algo que mi novio lleva haciendo un tiempo y a lo que yo todavía no le he pillado el punto porque me encanta guardar todo, hasta el cuadernillo más insulso de DVD comprado con el periódico, pero con estos cajones de madera tan bonitos que nos enseñas a lo mejor me lo pienso otra vez… Por cierto, yo le pondría la chapita original 🙂 Yo era muy de tener libros, DVDs y CDs en formato físico, pero desde que he descubierto sus correspondientes formatos digitales me voy "convirtiendo" poco a poco… será todo cuestión de tiempo.
    Besos y buen finde!

    • Paula
      Posted at 22:07h, 23 noviembre Responder

      Ya te digo que a mí me horrorizaba la idea, pero no paro de tirar cosas, cajas de CD, DVD y juegos incluidas y empiezo a descubrir la cantidad de espacio que no sabía que tenía y que puedo aprovechar para otras cosas o para no tener nada, solo un espacio bonito.

      Creo que en mi casa al final va a quedar poca cosa, que cada vez soy más desapegada y me cuesta menos decir adiós. La paz mental que tienes con menos trastos no se puede comparar con nada!

      Muchos besos y feliz semana!

  • Wasel Wasel
    Posted at 21:04h, 23 noviembre Responder

    Yo soy de esas que no tiene ni una peli en DVD, confieso que no soy nada nostálgica con estas cosas y a la que veo que se puede tener en formato digital, me deshago de ellas. Igual con la música (hace años que uso Spotify). Si me regalan algún libro en papel, cosa rara, y es una novela, etc. En cuanto lo leo pasa a la biblioteca del barrio o a otra persona, tampoco lo guardo. Así que veo genial lo que estás haciendo con tus pelis, ya verás lo que agradeces ese espacio extra 😀

    • Paula
      Posted at 22:08h, 23 noviembre Responder

      Yo cada vez menos y voy agradeciendo cada vez más el hueco que queda (que se puede llenar con lana XD). Todavía no me he pasado totalmente al digital, pero por ejemplo, hemos empezado a usar mucho YouTube en la tele para poner música o sí, Spotify en el ordenador. Y es un descanso. Besos mil!

  • María R.
    Posted at 08:14h, 24 noviembre Responder

    Paula, me temo que soy me estoy volviendo digital. tengo un disco duro multimedia donde guardo todo todito… aunque sí conservo algunos dvd míticos o que simplemente me gustan.
    Me ha gustado tu entrada pq yo tengo una cajita igual en la que tengo metidos los cds de música.
    Un besote guapa

    • Paula
      Posted at 08:35h, 24 noviembre Responder

      ¡Es que es mucho más práctico! Superada la fase inicial de "no, no puedo, es imposible, qué daño me hace al corazón" ya está, hay más espacio, todo está recogido en el mismo sitio… Creo que no hay color. Y qué gracia que tengas una cajita igual. Un beso muy, muy gordo, ya queda menos!

  • Patrizia
    Posted at 16:39h, 25 noviembre Responder

    Menos mal que tengo pocos DVDs (lo contrario que CDs) y aún no me he visto en la tesitura, aunque te diré que hace poco estuvimos ordenando libros y… pude deshacerme de 5 o 6!!! Mi chico tiró dos cajas enteras, no se sabe si por despegado o por acumular tanta morralla ;). Ahora estamos de limpieza prenavideña de ropa, zapatos… Tengo la casa como un campamento y tus post en mi cabeza, pero poco a poco veo la luz. Y el sitio libre que ya me ocuparé de rellenar…

    • Paula
      Posted at 18:56h, 25 noviembre Responder

      Cada vez que miro los libros tiro alguno. De verdad! Ya sé que duele, pero… ¡es que no me caben! Igual que todo lo demás. Y acercándose la época navideña, ya sabes.

      Un beso enorme, guapi. Tómate un gluwein (o como se escriba, creo que hay una H por algún sitio que nunca sé poner) a mi salud en uno de esos mercadillos de ensueño.

  • Remorada | Purple Prose
    Posted at 21:38h, 01 diciembre Responder

    yo las tengo así, el Sr Torres sufrió lo suyo en su momento, pero ya se ha recuperado, nadie ha muerto y hemos ganado espacio, todos felices! x)

    • Paula
      Posted at 22:28h, 01 diciembre Responder

      Sí, yo fibrilé un poco en su día también, pero luego se me pasó y cada vez conservo menos pelis en sus embalajes originales. Pero las ediciones especiales todavía se me resisten. Ya caerán…

  • Mian Vich Homs
    Posted at 16:11h, 04 diciembre Responder

    Socorro, m'horroritza i encanta per parts iguals! Com decantes la balança?

    • Paula
      Posted at 00:21h, 05 diciembre Responder

      Doncs és fàcil: més espai per llanes, teles o washis. Què et sembla?

Post A Comment

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.