Especiero

10 Ene Especiero

Va, no diréis que no estoy totalmente on fire. He empezado el año con muchas ganas de hacer cosas, de organizar, de purgar y de arreglar.

Estoy preprando el Organización para desorganizados de mi cocina, que espero poder enseñaros pronto… la semana que viene, más o menos. Y una de las cosas que he hecho ha sido este especiero que hacía meses que quería probar.

La idea la vi en algún blog de organización, puede ser que fuera I heart organizing, pero no lo recuerdo. La cuestión es que lo había ido retrasando porque me daba palo pensar cómo colgar la plancha metálica, de dónde sacar la plancha metálica y cosas así (sí, lo confieso, así soy yo, me da pereza PENSAR cómo hacer algo).

Cuando decidí ponerme manos a la obra tardé más o menos una hora en acabar todo el proyecto (exacto, sí, idiota de mí) más el tiempo que tardé en desplazarme a la ferretería y a Ikea a buscar más especieros imantados (siete minutos, no lo olvidéis. Hasta me comí un frankfurt a la salida.)

Esto es todo lo que vais a necesitar: una plancha metálica (en cualquier ferretería y las hay con mil dibujos, como he descubierto meses después…), especieros con imán (yo solo los he encontrado en Ikea, así que son los que tengo, aunque no me acaba de convencer el plástico y no cierran todo lo bien que me gustaría… se pueden DIY con las cajitas metálicas típicas de las tiendas de scrap y unos imanes pegados con pistola de cola), plástico adhesivo decorativo (si sois pijas como yo y os gusta de colores, si no, la placa es bonita tal y como es), velcro para cuadros (luego hay foto para que lo veais), pintura de pizarra y celo de dos caras.

Lo primero es forrar la plancha metálica. Como los libros de los niños, calculáis lo que necesitáis y luego dobláis lo que sobra. Yo normalmente corto las esquinas en triángulo y así el revés me cuadra perfectamente.

¿Soy solo yo o esta foto causa un intenso dolor de cabeza?

Luego hay que fijar la plancha a la puerta del armario (porque no os lo he dicho, pero el especiero está enganchado a la parte interior de la puerta de uno de los armarios de la cocina para ahorrar espacio). Este paso es el que me daba más palo… ¿cómo lo iba a hacer? No quería hacer agujeros, no quería poner una cola que me arruinara la puerta… Pues nada, en la ferretería tardaron 1 nanosegundo en darme una buena respuesta: estas tiras de velcro industrial que aguantan hasta seis kilos de peso. Una en cada esquina, primero las pegué a la plancha y cuando estuvieron bien pegadas, les quité el papel por el otro lado y las pegué a la puerta del armario.

Y aguantó. Menudo suspiro de alivio pegué. Tenía preparado también por las dudas, una cinta adhesiva industrial de doble cara, para no dejar nada al azar.

Luego vinieron los especieros. Sabía que quería hacer algo con pintura de pizarra para poder escribir el nombre de las especias, porque llega un momento que me pierdo y puedo acabar poniendo canela en lugar de nuez moscada. Pero no sabía qué. Estuve planteándome diferentes plantillas, pero ninguna me convencía, y al final acabé haciendo una plantilla DIY con el papel que traían los especieros. Los doblé al medio y luego otra vez al medio y corté un círculo.

Lo pegué con celo de doble cara a mi bote y pinté con pintura de pizarra… Dos capas. Se seca en diez minutillos.

Luego ya solo queda llenar los especieros, pegarlos a vuestra plancha decorada (que también podéis pintar, decorar con decoupage o lo que queráis) y poner los nombres de las especias con tiza (yo tuve la inestimable ayuda del pompón friki).

Y ya está. Las especias ordenaditas (todavía tengo espacio para otra fila de especieros e incluso para otra plancha justo debajo de esta), espacio libre en el armario y buen rollo por haber acabado otro de esos proyectos que quería hacer desde hace meses… Si me hacéis comentarios, mi felicidad será completa :^P